Colección: Ducha Anal

DUCHAS ANALES | PARA HACER EL AMOR DE FORMA LIMPIA E HIGIÉNICA

Con una ducha anal puedes limpiar tu zona anal o, más específicamente, la última sección de tu recto.

¿QUÉ ES UNA DUCHA ANAL?

Con una ducha anal puedes adecentar tu zona anal, más concretamente, la última sección de tu recto. El extremo de una ducha anal acostumbra a tener forma ergonómica a fin de que pueda introducirla sencillamente en el ano. Bastantes personas utilizan una ducha antes de practicar sexo anal para eludir sorpresas antihigiénicas.

¿POR QUÉ DEBO UTILIZAR UNA DUCHA ANAL?

En realidad, una ducha anal puede utilizarse no solo como preparación para el sexo anal, sino que también tiene beneficios para la salud: El agua caliente estimula el peristaltismo intestinal, lo que es útil en el caso de estreñimiento. Las duchas anales asimismo pueden asistir a tratar las hemorroides. Además de esto, también puede eludir la inflamación o irritación del intestino o las grietas anales si usa un enema para las duchas anales.

¿CUÁLES SON LOS DISTINTOS TIPOS DE DUCHAS ANALES?

Existen dos tipos de duchas anales. El primero es la ducha de bola o bomba de enema. Consiste en un cuello o tubo estrecho a través del que se bombea suavemente con la mano agua desde un recipiente redondo hasta los intestinos. La otra variante son los accesorios que puedes conectar directamente a la manguera de tu ducha de mano en la ducha o bañera. Aquí, no obstante, debe llevar cuidado de que el agua no entre en sus intestinos a una presión demasiado alta. Las duchas suelen ser de caucho médico, plástico o acero inoxidable. Las duchas de goma médica tienen el beneficio de que son más blandas y flexibles.
Depende de ti y de tus preferencias la versión que elijas. Al tiempo que el accesorio de ducha es un poco más práctico pues el agua sale de forma directa de la manguera, las jeringuillas para enemas son fáciles de emplear y asimismo son idóneas para llevarlas de viaje.

¿CÓMO SE UTILIZA UNA DUCHA ANAL?

Una ducha anal es sencillísima, rápida y no duele si se emplea correctamente. La forma más fácil de usarla es en la ducha o el baño. Muchas personas emplean la ducha de pie, al tiempo que a otras les resulta más simple tumbadas. Lo mejor es que pruebes en qué posición te resulta más simple.
Llena la ducha de agua. La temperatura debe estar entre 34 y treinta y siete grados para que no resulte incómoda. Lo mejor es revisar anteriormente la temperatura en la parte inferior de la muñeca. La jeringa del enema debe estar absolutamente llena de agua y no debe contener aire. Si inyectas aire en el intestino, esto puede provocar flatulencias desagradables más adelante.
Ahora ponga una pierna en el borde de la bañera o contra la pared de la ducha e inclínese sutilmente cara delante. Si te resulta más cómodo estar tumbada, separa las piernas.
Ahora introduce la punta de la ducha anal en el ano, a unos 3 o 4 centímetros de profundidad. Es mejor usar un tanto de lubricante a fin de que resulte más cómodo. Esto también ayuda a eludir lesiones en el ano y la mucosa intestinal.
Ahora enjuaga el agua de la ducha en el recto apretando la bola del extremo de la ducha. A continuación, vuelva a sacar la ducha.
Ahora intente mantener el agua en su intestino a lo largo de unos dos minutos.
Después puedes vaciar el intestino. Probablemente saldrá agua de color cobrizo. Si es así, repite el proceso hasta el momento en que el agua que salga sea transparente.
Con una ducha anal, que puedes conectar de forma directa a la ducha, el proceso funciona de igual modo. Sin embargo, primero debes probar cuánta agua necesitas para abrirla.

¿TENGO QUE UTILIZAR UNA DUCHA ANAL SI QUIERO PRACTICAR SEXO ANAL?

Puedes practicar sexo sin ducha anal. Así que si quieres limpiarte los intestinos ya antes del sexo anal es cosa tuya. No obstante, muchas personas se sienten más cómodas limpiándose el recto con juguetes anales antes del sexo anal o la masturbación anal. Después de todo, así tu pareja y podéis estar seguros de que no va a haber ningún accidente embarazoso mientras gozáis. Este conocimiento puede asistirte a dejar de lado temores y preocupaciones y a relajarte y dejarte llevar por completo. Así podrás disfrutar realmente del sexo anal sin preocupaciones.

¿CÓMO DEBO LIMPIAR Y CUIDAR MI DUCHA ANAL?

Dado que es prácticamente seguro que la ducha anal entre en contacto con restos de heces, es fundamental limpiarla a fondo. Así evitará que se formen bacterias patógenas en la ducha. Por consiguiente, debe enjuagar bien tu anal con agua tibia después de cada uso y repetir este proceso inmediatamente antes de cada uso. Asimismo puede utilizar un desinfectante para juguetes eróticos. Estos limpiadores de juguetes no dañan las mucosas, por lo que puede utilizarlos sin dudarlo para los juguetes o para su ducha anal. Tras la limpieza, debes guardar la ducha en un lugar seco y limpio, preferiblemente en una bolsa o caja.